Región

Arizona

125 especie

Arizona es uno de los cincuenta estados que, junto con Washington D.

Geografía

El estado de Arizona es, desde el punto de vista geomorfológico, una sección de la Gran Cuenca y de la Gran Cordillera del suroeste de los Estados Unidos. Sus grandes regiones naturales son la Tierra Alta Mexicana, el desierto de Sonora y la meseta de Colorado. A estas regiones adicionan algunos autores una sección transicional, la así llamado zona transicional de Arizona, que se sitúa al norte de Sonora y en Tierra Alta Mexicana, así como al sur de la meseta de Colorado. Su territorio ocupa una superficie de 295 253 km², cuya extensión puede ser comparada con la de Italia.

La Tierra Alta Mexicana es una cadena montañosa que recorre el estado diagonalmente de sureste a noroeste; junto a esta cadena, en el suroeste, se halla el desierto de Sonora. Esta zona se caracteriza por una sucesión de sierras (los Montes Pinaleño, Santa Catalina y Huachuca, entre otras) y valles abruptos. La mayor parte de los picos no sobrepasan los 2400 m, sin embargo, algunos de ellos son más altos como el Monte Graham, el Lemmon o el Pico Miller. La extensión de la anchura de los valles entre estas cadenas montañosas varía entre 241 km y 97 km.

La meseta del Colorado cubre una gran sección del noreste del estado. Esta meseta se prolonga por los estados de Utah, Colorado y Nuevo México. En realidad, esta región no es una meseta uniforme sino una sucesión de planicies (con alturas que oscilan entre los 1524 y 2743 m) y valles. En esta zona se hallan cañones (como el espectacular y famoso Gran Cañón de Colorado, y el Cañón de Chelly) y montañas de origen volcánico (entre las que destacan el Pico Humphreys, de 3862 m, el punto más alto de Arizona). En el margen meridional de la meseta se encuentra una zona de despeñaderos.

Los ríos más importantes que recorren Arizona son el Colorado y sus tributarios. El Colorado entra en el estado procedente de Utah. Este discurre durante aproximadamente 350 km por la zona del Cañón y forma la frontera natural entre Nevada y Arizona, y Arizona y California. Sus afluentes más importantes en Arizona son el río Gila, el río Pequeño Colorado, y el Bil Williams. Arizona no cuenta apenas con lagos naturales, pero algunas presas han creado lagos artificiales entre los que destacan el Lago Powell, el Mead, el Mojave, el Havasu, el San Carlos, el Theodore Roosevelt y el Apache.

Flora y fauna

Arizona cuenta con una amplia diversidad de vegetación como consecuencia de su terreno variado. En el desierto crecen numerosas especies de cactus, como el saguaro, cuya flor es la flor estatal, las chumberas y la yuca. La jojoba, una especie de arbusto que crece en áreas desérticas, es muy apreciada por sus numerosas propiedades. En altitudes más elevadas, en las montañas, crecen píceas, abetos, enebros, pinos ponderosa y robles.

La fauna de Arizona también es variada. Va de los lagartos y las serpientes del desierto a los ciervos, alces y antílopes de las montañas del norte. También se encuentran pumas, jaguares, coyotes y osos pardos y negros, además de tejones, liebres de cola negra y zorros grises. Entre los pequeños mamíferos se cuentan varias especies de conejos, ratones, y ardillas. Los perritos de la pradera salpican las regiones del norte. En el desierto abundan las serpientes, además de otros reptiles como los lagartos de collar y las chacahualas. Entre las aves nativas destacan la cotorra serrana occidental y la matraca del desierto (que es el pájaro estatal).

Clima

Debido a su gran extensión y a las variaciones de altitud, el estado presenta una extensa variedad de condiciones climáticas localizadas. En las altitudes más bajas (en el sur del Estado), el clima es en su mayoría desértico, con inviernos suaves y veranos calurosos. Normalmente, de finales de otoño a principios de la primavera el tiempo es suave, siendo la temperatura mínima de 15 °C. Entre noviembre y febrero son los meses más fríos (temperaturas entre 4 y 24 °C), aunque no son infrecuentes las heladas.

Aproximadamente a mediados de febrero, las temperaturas empiezan a subir de nuevo, con días cálidos y frías noches de viento. El verano arizoniano, de mayo a agosto, se caracteriza por un calor seco que oscila entre los 32 y 48 °C. En áreas desérticas se pueden registrar puntualmente temperaturas que superan los 52 °C. Debido en gran medida al clima árido, tienen lugar a menudo grandes oscilaciones de temperaturas entre el día y la noche (algunas de hasta 28 °C en los meses de verano). La mayor temperatura registrada en Arizona fue de 53 °C, medidos el 29 de junio de 1994

Por su parte, el tercio norte de Arizona es una meseta con una altitud significativamente más alta que el desierto, más bajo, y tiene un clima más fresco, con inviernos fríos y veranos suaves. No son raras las temperaturas muy bajas, pues suelen afectar al estado los sistemas de aire frío venidos de los estados del norte y de Canadá, haciendo que las temperaturas caigan por debajo de los 18 °C en las partes más altas de Arizona. La menor temperatura registrada en Arizona fue de -40 °C, el 7 de enero de 1971, en el lago de Hawley.

Arizona tiene una precipitación media anual de 322 mm. Esta distribución no es uniforme, pues las mayores tasas de precipitación media anual se localizan a lo largo de la región central, y las menores, al suroeste. En las regiones del centro, la precipitación media anual es superior a 50 centímetros, mientras que en el suroeste, es inferior a 15. Las regiones de mayor altitud de Arizona pueden recibir más de 70 centímetros de nieve cada año. La precipitación lluviosa se concentra en dos estaciones húmedas. Durante el invierno vienen frentes fríos del océano Pacífico, y en verano se produce el monzón.

La temporada de monzón se extiende de mediados de julio a agosto y trae vientos, relámpagos, tormentas y lluvias torrenciales. Es raro que se den tornados y huracanes en Arizona, pero existen registros de que se han producido con anterioridad.

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Arizona es uno de los cincuenta estados que, junto con Washington D.

Geografía

El estado de Arizona es, desde el punto de vista geomorfológico, una sección de la Gran Cuenca y de la Gran Cordillera del suroeste de los Estados Unidos. Sus grandes regiones naturales son la Tierra Alta Mexicana, el desierto de Sonora y la meseta de Colorado. A estas regiones adicionan algunos autores una sección transicional, la así llamado zona transicional de Arizona, que se sitúa al norte de Sonora y en Tierra Alta Mexicana, así como al sur de la meseta de Colorado. Su territorio ocupa una superficie de 295 253 km², cuya extensión puede ser comparada con la de Italia.

La Tierra Alta Mexicana es una cadena montañosa que recorre el estado diagonalmente de sureste a noroeste; junto a esta cadena, en el suroeste, se halla el desierto de Sonora. Esta zona se caracteriza por una sucesión de sierras (los Montes Pinaleño, Santa Catalina y Huachuca, entre otras) y valles abruptos. La mayor parte de los picos no sobrepasan los 2400 m, sin embargo, algunos de ellos son más altos como el Monte Graham, el Lemmon o el Pico Miller. La extensión de la anchura de los valles entre estas cadenas montañosas varía entre 241 km y 97 km.

La meseta del Colorado cubre una gran sección del noreste del estado. Esta meseta se prolonga por los estados de Utah, Colorado y Nuevo México. En realidad, esta región no es una meseta uniforme sino una sucesión de planicies (con alturas que oscilan entre los 1524 y 2743 m) y valles. En esta zona se hallan cañones (como el espectacular y famoso Gran Cañón de Colorado, y el Cañón de Chelly) y montañas de origen volcánico (entre las que destacan el Pico Humphreys, de 3862 m, el punto más alto de Arizona). En el margen meridional de la meseta se encuentra una zona de despeñaderos.

Los ríos más importantes que recorren Arizona son el Colorado y sus tributarios. El Colorado entra en el estado procedente de Utah. Este discurre durante aproximadamente 350 km por la zona del Cañón y forma la frontera natural entre Nevada y Arizona, y Arizona y California. Sus afluentes más importantes en Arizona son el río Gila, el río Pequeño Colorado, y el Bil Williams. Arizona no cuenta apenas con lagos naturales, pero algunas presas han creado lagos artificiales entre los que destacan el Lago Powell, el Mead, el Mojave, el Havasu, el San Carlos, el Theodore Roosevelt y el Apache.

Flora y fauna

Arizona cuenta con una amplia diversidad de vegetación como consecuencia de su terreno variado. En el desierto crecen numerosas especies de cactus, como el saguaro, cuya flor es la flor estatal, las chumberas y la yuca. La jojoba, una especie de arbusto que crece en áreas desérticas, es muy apreciada por sus numerosas propiedades. En altitudes más elevadas, en las montañas, crecen píceas, abetos, enebros, pinos ponderosa y robles.

La fauna de Arizona también es variada. Va de los lagartos y las serpientes del desierto a los ciervos, alces y antílopes de las montañas del norte. También se encuentran pumas, jaguares, coyotes y osos pardos y negros, además de tejones, liebres de cola negra y zorros grises. Entre los pequeños mamíferos se cuentan varias especies de conejos, ratones, y ardillas. Los perritos de la pradera salpican las regiones del norte. En el desierto abundan las serpientes, además de otros reptiles como los lagartos de collar y las chacahualas. Entre las aves nativas destacan la cotorra serrana occidental y la matraca del desierto (que es el pájaro estatal).

Clima

Debido a su gran extensión y a las variaciones de altitud, el estado presenta una extensa variedad de condiciones climáticas localizadas. En las altitudes más bajas (en el sur del Estado), el clima es en su mayoría desértico, con inviernos suaves y veranos calurosos. Normalmente, de finales de otoño a principios de la primavera el tiempo es suave, siendo la temperatura mínima de 15 °C. Entre noviembre y febrero son los meses más fríos (temperaturas entre 4 y 24 °C), aunque no son infrecuentes las heladas.

Aproximadamente a mediados de febrero, las temperaturas empiezan a subir de nuevo, con días cálidos y frías noches de viento. El verano arizoniano, de mayo a agosto, se caracteriza por un calor seco que oscila entre los 32 y 48 °C. En áreas desérticas se pueden registrar puntualmente temperaturas que superan los 52 °C. Debido en gran medida al clima árido, tienen lugar a menudo grandes oscilaciones de temperaturas entre el día y la noche (algunas de hasta 28 °C en los meses de verano). La mayor temperatura registrada en Arizona fue de 53 °C, medidos el 29 de junio de 1994

Por su parte, el tercio norte de Arizona es una meseta con una altitud significativamente más alta que el desierto, más bajo, y tiene un clima más fresco, con inviernos fríos y veranos suaves. No son raras las temperaturas muy bajas, pues suelen afectar al estado los sistemas de aire frío venidos de los estados del norte y de Canadá, haciendo que las temperaturas caigan por debajo de los 18 °C en las partes más altas de Arizona. La menor temperatura registrada en Arizona fue de -40 °C, el 7 de enero de 1971, en el lago de Hawley.

Arizona tiene una precipitación media anual de 322 mm. Esta distribución no es uniforme, pues las mayores tasas de precipitación media anual se localizan a lo largo de la región central, y las menores, al suroeste. En las regiones del centro, la precipitación media anual es superior a 50 centímetros, mientras que en el suroeste, es inferior a 15. Las regiones de mayor altitud de Arizona pueden recibir más de 70 centímetros de nieve cada año. La precipitación lluviosa se concentra en dos estaciones húmedas. Durante el invierno vienen frentes fríos del océano Pacífico, y en verano se produce el monzón.

La temporada de monzón se extiende de mediados de julio a agosto y trae vientos, relámpagos, tormentas y lluvias torrenciales. Es raro que se den tornados y huracanes en Arizona, pero existen registros de que se han producido con anterioridad.

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