Vespa mandarinia, Avispa gigante asiática, Avispón asiático
El avispón gigante del norte (Vespa mandarinia) , también conocido como avispa gigante asiática o avispón asiático, es una especie de insecto himenóptero de la familia Vespidae. Tiene una longitud de 5 cm y una envergadura alar de 7,5 cm. Es muy corpulento y posee un potente veneno capaz de disolver los tejidos. Es agresivo y, a diferencia de los abejorros, no tolera la cautividad. Además, dispone de unas mandíbulas potentes, armaduras protectoras y uñas tarsales para sujetar a su víctima. Debido a estas características son apodados «avispones asesinos».
Es de color naranja y bastante grande (las reinas pueden medir más de 50 mm, las obreras de 35 a 40 mm) en comparación con otras especies de avispas. Sus ojos compuestos y ocelos son de color azul oscuro a negro; las antenas son de color marrón oscuro con una base anaranjada. El clípeo (placa de escudo en la parte frontal de la cabeza) es de color anaranjado; el lado posterior del clípeo tiene lóbulos redondeados estrechos. Las mandíbulas son grandes y de color naranja con un diente negro usado para escarbar.
El tórax (propodeo) es marrón oscuro, con un amplio escutelo (escama de escudo en el tórax) que tiene una línea medial profunda; la placa detrás del escutelo sobresale y domina el propodeo. Las alas son grises y miden 3.5 a 7.5 cm de envergadura. Las patas delanteras son de color naranja, con tarsos de color marrón oscuro; las otras patas son de color marrón oscuro.
El gáster es de color marrón oscuro con blanco, con bandas amarillas estrechas en los márgenes posteriores del tergo, el sexto segmento es enteramente amarillo. El aguijón mide hasta 10 mm. Es similar en apariencia a la avispa europea (Vespa crabro).
V. mandarinia anida en las tierras bajas y bosques, al pie de las sierras. Es una especie dominante que no necesita esfuerzos de conservación. Son comunes en regiones alteradas por los humanos. Hacen nidos subterráneos a diferencia de otras especies del género Vespa. Usan huecos, causados por descomposición de madera de raíces, o los nidos abandonados de roedores, serpientes u otros animales excavadores. La entrada a esos nidos puede tener una profundidad de 2 a 60 cm; luego se extiende en forma horizontal, vertical o en ángulo. Las reinas prefieren cavidades angostas.
Los nidos, típicamente carecen de envoltura. Durante las primeras etapas de formación, tienen forma de un tazón invertido. A medida que el nido crece, se añaden de una a tres capas de celdillas o panales. Un sistema de un pilar principal y pilares secundarios conectan los panales. Pueden llegar a tener de cuatro a siete panales. El más superior es abandonado al final del verano y se lo deja pudrir. El más grande está al medio. El más grande observado medía 49,5 cm por 45,5 cm con 1192 celdillas.
Como en otros insectos sociales el ciclo del nido incluye seis fases.
Debido a su potencial colonizador y por constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies exóticas Invasoras, aprobado por Real Decreto 6/30/2013, de 2 de agosto.